La
actitud de ataque y criticas a los errores naturales del ser humano marcan
claramente la falta de definición progresista de los dirigentes civiles de
nuestro pueblo.
Un
pueblo no crece criticando maltratando o quizás hasta humillando su gente sino
que para un pueblo dedicarse a crecer debe contar con un liderazgo estratégico
que sea capaz de tolerar y dirigir el pueblo por sendero de desarrollo siempre
teniendo presente las buenas costumbres y la convivencia feliz de todos sus
moradores. No pensando simplemente en la construcción de estructura de cemento
muchas veces quedas sepultada en el frío sótano de del olvido.
Gaspar
Hernández no puede seguir por el sendero del un destino incierto fomentado por
la falta de capacidad y visión de muchos quienes además amparado por
estructuras políticas sin cerebro que solo piensa en el voto de un día el cual
solo sirve para crear mas pobreza y tristeza de nuestro moradores
No hay comentarios:
Publicar un comentario